El atleta de montaña Kilian Jornet ha completado con éxito States of Elevation, una travesía sin precedentes que une los picos de 4267 m (14 000 pies) de Estados Unidos. En un mes, Jornet coronó los 72 catorce picos de los 48 estados contiguos (Estados Unidos continental, excluyendo Alaska y Hawái), recorriendo miles de kilómetros a pie y en bicicleta en uno de los proyectos más exigentes de su carrera.
Para Jornet, el viaje fue un descubrimiento más allá de un desafío físico: una forma de moverse y explorar nuevos lugares, impulsado únicamente por su propio movimiento. Lo que hizo el desafío aún más extraordinario no fue solo la escalada en sí, sino la enorme distancia necesaria para unir picos en diferentes estados. La magnitud del proyecto es difícil de comprender. Para ponerlo en perspectiva, el proyecto es comparable a unir varios Tours de Francia y decenas de maratones, pero todos a gran altitud.
El proyecto comenzó el 3 de septiembre con la cima del Longs Peak en Colorado y concluyó un mes después en el Monte Rainier en Washington. Desde las escarpadas Montañas Rocosas hasta los desiertos de California, atravesando la majestuosa Sierra Nevada y, finalmente, a través de Oregón, hasta los bosques del estado de Washington, Jornet recorrió una inmensa variedad de paisajes y descubrió una parte de Estados Unidos que le era prácticamente desconocida:
Estoy muy contento de haber llegado hasta aquí. Cuando empecé este proyecto, era solo una idea en un mapa; algo que pensé que podría ser genial, pero no sabía si sería posible. Ahora veo que lo fue, y más allá de las cifras, ha sido una auténtica aventura: una forma de descubrir lugares que se han vuelto muy especiales para mí.
El proyecto abarcó tres estados principales: Colorado, California y Washington. La aventura de Jornet comenzó en las montañas de Colorado, donde escaló las 56 rutas públicas de catorce picos del estado. Entre los puntos culminantes se incluyen travesías emblemáticas como la autopista de Los Ángeles, el Elks y el Nolan’s 14, así como algunas de las cumbres más emblemáticas de Colorado, como el monte Elbert y el Pikes Peak. Estas rutas técnicas, que requerían resistencia y experiencia, desafiaron a Jornet a sortear el clima impredecible y el terreno implacable de Colorado, desde tormentas feroces hasta fuertes vientos. Algunas de estas conexiones de catorce picos suelen llevar a los ultrarunners varios días en completarse. Jornet, sin embargo, se movió con eficiencia por las montañas, pasando a menudo más de 16 horas diarias en movimiento.
Tras completar Colorado, Jornet pedaleó hacia el oeste, más de 1400 kilómetros en bicicleta, hacia California. Allí, se enfrentó a un desafío completamente diferente: los áridos accesos desérticos de las Montañas Blancas, las crestas técnicas de Sierra Nevada y el largo y aislado ascenso al Monte Shasta, donde la nieve y los fuertes vientos pusieron a prueba su resistencia. Un momento destacado fue la travesía Norman’s 13 en Sierra Nevada, que rápidamente se convirtió en el tramo favorito de Jornet del proyecto. A pesar de llevar 23 días en movimiento, Kilian logró avanzar rápidamente, lo que resultó en un nuevo FKT con apoyo (pendiente de confirmación oficial).
Desde California, Jornet continuó hacia el norte a través de Oregón y hacia el noroeste del Pacífico de Washington, donde cerró el proyecto con el icónico Monte Rainier. La ascensión fue una de las más técnicas de los Estados de Elevación, y en esa época del año era incierto si sería posible alcanzar la cima. La nieve recién caída en los días previos había hecho la ruta más exigente, pero Jornet logró llegar a la cima y regresar sano y salvo. De vuelta con el equipo, comió pizza y explicó:
Me ha sorprendido la naturaleza salvaje, la fauna y cuánto cambian los paisajes. Me encantó hacerlo por mis propios medios, pero también contar con la compañía de amigos que vinieron a compartir un momento y a enseñarme su casa. Estoy muy contento con el resultado del proyecto.
Con Rainier completado, el viaje se completó: un mes después de comenzar en Colorado, Jornet había coronado 72 catorce picos completamente por sus propios medios, a pie y en bicicleta.
La magnitud de States of Elevation es difícil de comprender. A diferencia de una carrera o un intento de récord, no tenía puntos de referencia externos. El proyecto exigía miles de kilómetros de movimiento y un inmenso desnivel positivo. Para ponerlo en perspectiva, era el equivalente a unir varios Tours de Francia y decenas de maratones, pero todo a gran altitud.
En States of Elevation, Jornet recorrió 5145 km por sus propios medios: 4133 km en bicicleta (80%) y 1011 km a pie (20%), ascendiendo 123 045 m. Si bien la mayor parte de la distancia se recorrió en bicicleta, casi el 60% del tiempo total se dedicó a pie, con un promedio de 15 horas de movimiento al día.
A lo largo de su trayectoria, Kilian contó con el apoyo de una comunidad dedicada de atletas que aportaron su tiempo, conocimientos y experiencia. Estos momentos de compañía aportaron calidez a un proyecto que, de otro modo, estaría marcado por la soledad, las tormentas y las largas horas de esfuerzo.
Para cerrar este capítulo de States of Elevation, la Fundación Kilian Jornet (KJF) celebró una trayectoria que trascendió las cumbres. La iniciativa organizó cuatro eventos Running Minds y dos jornadas de restauración de senderos, en las que participaron más de 500 personas de varios estados de EE. UU. Se planea un último evento Running Minds, con la asistencia prevista de más de 200 asistentes. En colaboración con 21 organizaciones asociadas y narradores, la KJF amplificó los temas de restauración, reconexión y resiliencia. Los participantes firmaron 79 tarjetas instando a los legisladores a apoyar la preservación de las tierras públicas. De principio a fin, la Fundación Kilian Jornet coordinó activaciones sobre el terreno, convocó a colaboradores locales y elevó las voces de la comunidad a esta plataforma colectiva. La trayectoria sirvió como recordatorio de que la humanidad es inseparable del mundo que explora. Cada kilómetro y cada cumbre profundizaron el vínculo con la naturaleza, inspirando asombro, humildad y un renovado sentido de pertenencia.