Barrio de Jamaica, Queens, Nueva York. Una escuela secundaria ubicada en una manzana de algo menos de 900 metros de perímetro y 3100 millas de distancia a completar en 52 días. Es la Sri Chinmoy Self-Transcendence 3,100 Mile Race y, probablemente, la carrera más larga del mundo y más dura mentalmente de completar.
Sólo 49 personas en la historia de la prueba han logrado completar una prueba que suele comenzar el tercer domingo de junio y que se prolonga, durante 52 días, hasta mediados de agosto. El objetivo, completar 3100 millas (4960 kilómetros) o, lo que es lo mismo, casi 60 millas al día (alrededor de 95 kilómetros), invirtiendo cada día el sentido de la marcha. Los participantes puedes completar cada etapa en 18 horas, desde las 6 de la mañana hasta medianoche. Hay un avituallamiento central con abundante comida, sólo vegetariana, y un espacio donde descansar, con una caravana propia para cada corredor.
La prueba fue ideada por Sri Chinmov, fallecido en 2007, un maestro zen que la concibió más que como una competición como un ejercicio de introspección y autotrascendencia, algo que, aseguraba, está muy relacionado con la ultradistancia. «En nuestra experiencia como corredores, llega un momento en una carrera en el que la destreza física de uno ha llegado a su límite. Para continuar, el corredor debe confiar en su propia determinación interna, para aprovechar el poder espiritual infinito que está dentro de todos nosotros».
Andrea Mercato fue el ganador de la edición 2021. Para participar en la carrera es necesario acreditar que se ha finalizado una prueba de 6 días anteriormente. Este año sólo siete participantes lo intentaron y, entre ellos, una mujer. Para todos ellos, a pesar del esfuerzo, cada día el cuerpo se adapta a la situación aunque lo más complicado, coinciden todos, es volver a la vida normal después de los 52 días de competición.