Caminar hacia una misma, el Camino de Santiago de Lucy Alves
Salí de Saint-Jean-Pied-de-Port con miedo y emoción a partes iguales, con la mochila llena de incertidumbre y el corazón abierto a todo lo que vendría. Cada paso, cada sendero me enseñó que el cambio no se fuerza, que la transformación llega poco a poco, paso a paso, cuando te atreves a mirarte de frente.
Aprendí a escucharme. A sentir mi cuerpo, mis emociones, mi propia luz. En cada etapa, bajo lluvia, sol, niebla y viento, descubrí que la fuerza verdadera no está en las piernas, sino en la decisión de avanzar, incluso…