La séptima edición de la Pyrenees Stage Run (PSR) ha arrancado este domingo con una primera etapa de 27 kilómetros y 2.400 metros de desnivel positivo. Los 50 equipos participantes han salido desde Ribes de Freser (El Ripollès) para completar un recorrido con final en el Santuario de Núria. Esta carrera de montaña por etapas, organizada por BiFree, cruza los Pirineos en siete etapas, sumando un total de 220 kilómetros y más de 15.000 metros de desnivel. Un evento deportivo que cuenta con el patrocinio de TUGA Active Wear y del Patronat de Turisme de la Costa Brava Pirineus.
Todos los participantes han empezado su propia aventura de cruzar los Pirineos, resiguiendo el clásico GR11 en equipos de dos o tres personas, para completar un largo recorrido con grandes desniveles e impresionantes escenarios de montaña. El objetivo que tienen es cruzar la meta de la última etapa con final en Salardú (Val d’Arán) el próximo sábado 9 de septiembre. Todo ello, en una edición que cuenta con un 89% de corredores internacionales, de 21 países diferentes, y un 36% de participación femenina.
El balance de la primera etapa
El inicio de la Pyrenees Stage Run ha sido de nuevo, como en las anteriores ediciones, desde la localidad de Ribes de Freser, pero con varias novedades en cuanto al recorrido. A diferencia de los anteriores años, la primera jornada ha finalizado en el emblemático Santuario de Núria, en vez de Queralbs. Los corredores han pasado por Pardines, por la cumbre del Balandrau (2.585 metros), por el Coll de Tres Pics (2.396 metros) y luego se han dirigido hacia al refugio de Coma de Vaca y posteriormente han superado el Coll del Torreneules antes de llegar a Núria.
El codirector de BiFree Sports, Tomàs Llorens, ha explicado que “el nuevo final con llegada al Santuario de Núria ha gustado mucho a los participantes, ha sido un cambio positivo respecto al año pasado que ha gustado mucho a los repetidores de la PSR”. Llorens también ha destacado que “en general todo el mundo ha acabado muy contento y este lunes haremos la segunda etapa, completamente nueva, con subida al Puigmal y con muchas ganas”, ha añadido.
Satisfacción entre los participantes
Los ganadores en categoría masculina y general han sido los componentes del equipo Turmells Team, formado por Àlex y Roger, que han completado el recorrido en 3 horas y 46 minutos. Una vez finalizada la etapa, han apuntado que “ha sido una experiencia increíble, la carrera nos ha gustado mucho con el cambio de recorrido de este año. La primera subida ha cambiado un poco y creo que es un acierto con un ascenso más vertical. Una vez hemos llegado al refugio de Coma de Vaca hemos visto que también ha sido un acierto hacerlo por este nuevo valle”.
Los tres integrantes del equipo Serpiente emplumada, formado por dos mexicanos y una corredora de los Estados Unidos, han destacado que la primera etapa “ha sido muy bonita, difícil con las primeras subidas, pero la organización y la carrera es fantástica, el recorrido es precioso y los voluntarios y los directores de carrera, como siempre, han puesto todo su esfuerzo para marcar bien la carrera y con una energía muy positiva”.