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El Laboratorio de Juan. Camelbak Nano. Alta capacidad en el mínimo espacio

¿Cómo? ¿Que en una mochila de 150 gramos podemos llevar hasta 1 litro de hidratación, el smartphone, nutrición, cortavientos, gorro o buff, guantes, y.... los bastones? Y que además, ¿podemos sacar los bastones en marcha, de forma increíblemente rápida, sin quitarnos la mochila!!?

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Por Juan González
Juan González es colaborador de Territorio Trail Media y nuestro experto en material y tester

 

Cuando llega un punto en el que parece que todo, o casi todo está inventado, llegan los americanos de Camelbak, y sacan de la mesa de diseño una mochila-chaleco, con un peso reducido sin renunciar en absoluto a la comodidad (con esa formidable malla 3D que tanto me gusta..) ni a la durabilidad (importante), construyendo un producto práctico, con la principal característica de poder llevar los bastones de forma cómoda, y que además resulta fácil sacarlos cuando nos vemos en la necesidad de utilizarlos.

Vamos por partes, y conozcámosla.

¿CÓMO ESTÁ DISTRIBUIDA?

La parte delantera es prácticamente idéntica a su hermana de catálogo Ultra Pro Vest 4´5L., es decir, encontramos en la parte superior de los tirantes un bolsillo con cremallera de gran capacidad (tirante izquierdo) en nylon, con generoso tirador muy práctico para utilizar con guantes y ribeteado con cinta reflectante.  Es un bolsillo de tipo fuelle, y gracias a ello, podremos introducir nuestro smartphone.  En el tirante derecho tenemos un bolsillo con solapa del mismo tamaño que el de lado izquierdo, pero con acceso superior, y en lugar de construirse con nylon, se ha utilizado la transpirable y suave malla Ketten elástica, vista así mismo en otras marcas. Junto a este bolsillo encontramos el silvato, que en cierto modo, me resulta curioso, y un tanto desconcertante, ya que no es una mochila destinada a ultra distancia, donde si es un elemento obligatorio. En cualquier caso, y por el ínfimo peso que representa, bienvenido sea.

En la parte inferior de los tirantes, en la disposición clásica de los modelos de la casa, tenemos los bolsillos reservados para el sistema de hidratación, un Quick Stow en cada lado, de 500ml. cada uno. Actualmente, y en mi opinión, los mejores bidones blandos del mercado.

Para abrocharnos la mochila tenemos las minimalistas cinchas personalizables en altura (8 eslabones), la superior en cinta espiga rígida para garantizar un ajuste firme (ideal en bajadas), y la inferior de la misma anchura pero en goma elástica para tener una tolerancia, cuando inclinamos el torso (en las subidas), y no necesitamos tanta firmeza de ajuste.

En los laterales se han ubicado 4 bolsillos -en total- en mesh elástico, es decir, en cada lado tenemos 2 bolsillos superpuestos, en 2 niveles con diferente inclinación en su acceso, para «encontrarlos» al tacto de forma algo más fácil. El bolsillo que queda  más hacia el  exterior comunica un lateral con otro, dándonos la posibilidad de ampliar más el espacio de carga y acceder a él con cualquier mano.

PARTE TRASERA, AHÍ ENCONTRAMOS SU ESENCIA.

Ciertamente, la parte trasera es la que más curiosidad me suscita. Tenemos a modo de compartimento principal diáfano y abierto lateralmente  el mesh que predomina exteriormente la mochila. Aquí podemos introducir una chaqueta, que quedará fijada a la espalda gracias a la compresión del propio tejido. Aunque no es un compartimento con cremallera, las aberturas laterales no son tan grandes como para que se nos salga el contenido, ya que además podemos desplazarlo hacia abajo, para que quede «encajado» en la parte baja. A pesar de lo exiguo que parece este compartimento, es curioso lo que podemos llegar a introducir!!

Sobre este compartimento, y en la zona externa-baja de la mochila, vemos un bolsillo que ocupa un tercio de la espalda. Este bolsillo es de resistente nylon Rip Stop y estructura tipo fuelle. Por fuera dispone de una cinta de espiga (idéntica que la cincha pectoral superior), que nos irá fenomental para colocar una luz trasera de posición tipo clip. Cercanas a los hombros y por encima del compartimento principal,  vemos dos cintas en diagonal de 3 cms. de anchura (en la izquierda impreso el nombre del modelo, y en la derecha el de la marca en reflectante) que juntamente con el bolsillito inferior antes citado, son 3 elementos que juegan un papel fundamental y esencial de esta mochila……

 

HACIENDO UN CURSILLO ACELERADO DE GUERRERO NINJA.

Llegó la hora de ponerse la mochila!! Y que ganas de ver si realmente, funciona el invento de Camelbak para llevar los bastones.

Toca rebobinar un poco (disculpadme), para entender como van colocados los palos. Como escribí más arriba, las dos cintas diagonales y el pequeño bolsillito exterior-inferior de la zona trasera, serán los encargados de sujetar nuestros bastones, y serán también los que faciliten que podamos sacarlos con rapidez (volverlos a introducir ya es otra historia…).

Llega la hora de preparar nuestra Nano para salir al monte. Introducimos lo que consideremos necesario, y con nuestros palos en las manos, miramos con incredulidad cómo y por dónde, se meten los palos.  Fácil; hay que pasar cada palo por la cinta diagonal en la parte superior (que asome la empuñadura y dragonera), y la zona inferior (mejor sin roseta, por cuestión de espacio) la introducimos en el bolsillito. Y así con el otro palo. Y Punto. Nada más, no hay que pasar ninguna goma, ningún tensor….. Absolutamente nada.  A continuación nos la ponermos,  abrochamos y ajustamos a nuestro gusto, y a trotar!!

Nos acercamos a una temible subida, aquellas que nos hacen maldecir, y necesitamos los palos. Sin perder un segundo llevamos nuestros brazos por encima de la cabeza y hacia atrás, donde «encontraremos» las enpuñaduras de nuestros palos asomando a la altura de los hombros.  Pues bien, los agarramos, y tiramos con decisión de ellos. Ya tenemos los palos listos para ser utilizados. Es cuestión de ensayar este movimiento al más puro estilo «ninja».

COMPORTAMIENTO EN MARCHA.

Realmente notamos la ligereza de esta Nano y su calidad, me encanta esa malla 3D «de verdad», capaz de dejar pasar el aire, y con un tiempo de secado razonablemente reducido. Además hace de elemento amortiguante, y notamos un tacto agradable en nuestra espalda, con una estructura que hace difícil que nos clavemos o nos molesten los palos. En la parte frontal, tenemos lo justo y necesario. No hay un gran número de bolsillos delanteros, por lo que deberemos escoger muy bien que llevamos, y dónde.

Empezamos a trotar, y en ningún momento notamos molestias en la espalda causada por los palos. Si que es cierto, que notamos más el ruido de los tramos de los bastones plegables chocando entre sí, que algún tipo de movimiento molesto. Llevando un cortavientos en el compartimento trasero hace que la mochila lógicamente se «hinche», y esto a su vez, hace que el bastón quede más presionado, y por tanto, reduciendo el ruido y vibraciones, y en consecuencia el posible movimiento.

 

¿PARA QUE NOS PUEDE SERVIR?

Creo que es una mochila ideal para carreras cortas y con mucho desnivel, donde no salgan muchos kilómetros, pero si  metros de ascenso, y por tanto, dediquemos varias horas para recorrerlos, y obviamente, necesitemos un mínimo de material y nuestros bastones nos resulten imprescindibles para la actividad a desarrollar.

Si lo nuestro es entrenar para kilómetros verticales, o salir a correr en zonas técnicas,  con desnivel, quizás aisladas de poblaciones y queramos ser autosuficientes, llevando nuestra hidratación y alimentación, además de alguna prenda de abrigo para posibles cambios en la climatología, esta mochila nos presenta una interesante candidatura.

CONCLUSIÓN.

Un aspecto claramente mejorable, es el de reforzar el bolsillito inferior que alberga los bastones. Si su parte exterior como he comentado anteriormente es de resistente nylon,  su cara interna es únicamente del tejido mesh del compartimento, demasiado fino, para aguantar los envites de los cantos de cada uno de los tramos de los bastones plegados y la afilada punta. Poniendo el mismo tejido en la cara interna (a modo de bolsillo «real»), obtendríamos una mayor resistencia, y durabilidad. Es un detalle sencillo, y asumible técnicamente, que puede alargar la vida útil de la mochila, permitiendo que la podamos disfrutar un mayor tiempo.

Calmelbak, como en el resto de modelos, no ha olvidado incluir múltiples reflectantes para hacernos visibles, sea desde el ángulo que sea. Un diez en este sentido.

Si hemos de tener una única mochila, y nos gustan las distancias largas, posiblemente no sea la mejor opción, pero si queremos un modelo más específico para actividades como las descritas más arriba, no te defraudará. Como tampoco lo harán sus acabados, y las posibilidades que ofrece a pesar de su -a priori- reducido espacio.

Está disponible colores negro o rojo, y tres tallas. El precio PVP recomendado es de 94´50 euros.

 

 

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